jueves, 17 de diciembre de 2009

de regreso al futuro a


Me acordé de regreso al futuro, del solo de guitarra de Michael j. Fox, pensé en su estado actual y me vino a la cabeza Marc. Este amigo de la adolescencia era un compendio de tics. Los médicos no habían encontrado ningún remedio a su continuo frenesí, y uno muy listo le recomendó que "transformara el significado de sus tics". Que es un tic? un movimiento involuntario sin sentido. Pues entonces dale el sentido del que carece (se ve que este hijodeputa leía mucho a Bucay) Desde entonces estar con Marc era una experiencia inclasificable. Estupor...? Podía haber llegado a ser considerado arte por algun colectivo underground nostálgico del fluxus? Lo único que se es que si el cabrón antes se movía como un loco y te ponía nervioso, ahora te dejaba exhausto, el aire se solidificaba a tu alrededor, no sabías si morir o matar, un pie en el Nirvana y otro en el Infierno. Síndrome de Stendhal? una mezcla entre Michael Jackson, ELvis, Chiquito... los reyes de cada uno su cosa... en una coctelera pasada de rosca... todos en Marc, brazos y pies entrelazados... murió intentando tocarse la campanilla con la lengua... o eso es lo que quisieron hacer creer.

ese sabor

Dos días llevo con el sabor del primer beso, da igual con quien. Después de bailar una de Roy Orbison agarrado a una silueta de aire, duermo solo. Con ese sabor. Que!!!

domingo, 13 de diciembre de 2009

Domingo Creole


que desastre de semana... que cerca de todo pero sin tocarlo... que lejos de todo en definitiva.

Y el domingo aparece Elvis,
el del 56 y el del 78,
el incipiente y seductor rey del rock y el gordo decadente ceñido con capa blanca,
y juntos pasamos el día...

los tres, sin casi ni hablarnos, cada uno la mirada perdida en un infinito distinto, escuchamos viejos temas de Arthur crudup, bebemos café y fumamos cigarrillos sin filtro.

El del 56 tendido en el suelo, la cabeza apoyada en el sofá, hace círculos con el humo del cigarrillo, el del 78 sentado en una silla del revés los brazos cruzados y el mentón apoyado en el respaldo observa como el humo sube hasta el techo. Yo estoy con las piernas cruzadas en el sofá, justo donde apoya la cabeza el del 56. A veces le acaricio el pelo y él cierra los ojos. Es suave, tal vez me lo deje crecer como él. El del 78 le da un trago al café y me sonríe,
y yo siento que tal vez esta semana no haya estado tan mal.

sábado, 17 de octubre de 2009

save the last bath for me




intro reM y luego movemos los dedos aleatoriamente, monosílabos siempre Lam#, esdrújulas Fadim, puntos y comas da Capo.

que bueno que es nadar,
que fácil dejarse llevar.
que lejos sale el Sol,
como cuesta empezar.

que guapa que es mamá,
papá se ha vuelto a enamorar.
y ahora hace aviones de papel,
y juega a ver cuan lejos puede llegar.

Confieso que me cuesta madrugar
y que soy lento,
me he perdido tantos besos que más da
De nuevo busco algo que lamentar
y me impaciento
si no encuentro algo que duela un poco más de verdad

Que bueno que es viajar,
que grande la bañera de este hotel.
cuanto aguanto sin respirar,
sumergido escucho el hilo musical.

que tendrá el minibar,
la chica de la limpieza lo sabrá.
me ha sonreido al pasar,
que desastre creo que me he vuelto a enamorar.

Confieso... ReM till de end, cuerdas al aire, reverencia, Da capo again

lunes, 12 de octubre de 2009

2a inmersión

Volvemos a sumergirnos, después de un permiso de tres días. El capitán nos pide que lo atemos al periscopio, que tiene que escuchar a las sirenas sin sucumbir a su hechizo. De nada sirven nuestras advertencias.
- antes de escucharlas, una de dos, o se ahoga o pilla una otitis de cachalote.
De sus delirios emana un fuerte a tufo a alcohol. Debe de haber vuelto a discutir con su mujer, la cual murió hace ya quince años pero lo espera en la primera taberna de cualquier puerto en el que atracamos. Lo tranquilizamos y como la imagen del burro tras la zanahoria atada a una cuerda, él camina hacia su camarote tras el rastro de ron que le ofrecemos de la vieja botella del aun más viejo Carlos. 3, 2 ,1 inmersión... mientras lo oimos susurrar ese verso de Machado... y cuando llegue el día del último viaje, y esté al partir la nave que nunca ha de tornar, me encontraréis a bordo ligero de equipaje, casi desnudo, como los hijos del mar.

sábado, 10 de octubre de 2009

Paranoid Park


Poesia en frames... y yo en un submarino de la segunda guerra mundial, perseguido por un calamar gigante espoleado por un Verne enfebrecido, las pobladas patillas llenas de algas. Nuestro cocinero, un ruso zoófilo (quien sabe si alguno de nuestros siempre sabrosos y delicados ranchos no ha pasado antes por su lecho)con destreza exquisita para el sushi, empuña la sartén y amenaza al jinete subacuático. hoy cenaremos tarde.

sábado, 3 de octubre de 2009

lunes, 21 de septiembre de 2009

asas

sueños que son certezas,
que nos cambian de sitio:
del sofá a la cama,
de un peldaño a Sinaloa.
Pasos de huella equívoca
con cuentos escritos en las suelas,
germen del jazmín sediento de verano
crece en el poso del café
y se enarbola
en todas las cosas que tienen asas.
Armarios, cacerolas, maletas y tazas.
Y concienzudo disloca el nuevo día
las patas de la cama
para que no huya tras los vagabundos
acostumbrados a dormir en el suelo,
y nos deje solos,
desvelados,
y sin saber que nos ha pasado.

domingo, 20 de septiembre de 2009

acuerdo

Acordamos no hablar con nadie de lo que había pasado. Alicia tenía sangre reseca en la comisura del labio inferior. Se la limpié como lo hacen las tías abuelas al tratar de borrar las huellas de sus pintalabios de las mejillas de sus ahijados. Pulgar y saliva ante los ojos despavoridos de los pequeños. Alicia en cambio me sonríe con una mirada cómplice.
- No se lo diremos a nadie- mientras se acerca introduce el final de su frase entre mis labios. Un nadie que busca mi lengua y la acaricia, sus labios prensan mi labio superior y el sabor de la sangre que vuelve a manar de la pequeña herida me da ganas de sorber como un vampiro. Muerdo y nuestros dientes entrechocan. Ella alborota mi pelo, yo atraigo su cabeza con violencia contenida hacia mi hombro y muerdo su nuca. Al levantar la vista veo el cuerpo sin vida que yace en el suelo junto a nosotros. Nuestras respiraciones desbocadas lo hacen por todos los que lo han dejado de hacer esta noche. Apretamos la frente en la del otro con los ojos cerrados amansando la bestia que crece en nuestro interior. Parece que falta poco para que amanezca, y pensar que hace unas horas ni nos conocíamos, yo pedía una Coca-cola XL en el bar del cine y la miraba de reojo mientras ella no se decidía que chocolatina comprar.

sábado, 19 de septiembre de 2009

El frío

El frío nos pilló de improviso y todos nos constipamos. Incluso la prima Daniela, amante de las naranjas en el desayuno, la miel en la noche y el más vale prevenir durante todo el santo día, estornudó y se paseó por la casa abrazada a una caja de pañuelos de papel.
Congestionado como estaba y con la sensación de tener una cerilla a punto de prender en mi garganta, decidí pasarme el día cantando blues y aprovechar así la afonía para emular a R.L Burnside. Daniela insistía en que me tomara la taza humeante que acercaba temeraria a mi nariz. Miel con limón y un poquito de ron. Yo la rechazaba con un bajo al puro estilo John Lee Hooker, y ella volvía a la carga enumerando los beneficios de la miel y alabando a las abejas. Jodidas abejas, grité. Le arrebaté la taza y me tomé el liquido en tres tragos y entonces fue como cuando en las películas rocían a alguien con gasolina y lo prenden con una cerilla. Mi garganta quemaba. Un cuerpo en llamas lanzándose al suelo y rodando sin parar. Daniela, satisfecha cogió la taza que le ofrecía sin mirarla, odiándola con toda mi alma, y se fue a la cocina entre abejas y estornudos. Dejé de cantar y me quedé mirando la ventana: un cielo pesado como la prima Daniela y con ganas de aplastar el mundo. Pensaba que Septiembre no era un mes para estar enfermo y triste. Septiembre tenía que ser como un hasta luego, un nos volveremos a ver, y que no seríamos los mismos cuando eso ocurriera. Seriamos más fuertes. Lo tendríamos todo más claro y solo nos constiparíamos en Navidad, porque no nos da la gana salir con tanto frío y entonces sí, escucharíamos a Daniela mientras nos probamos la ropa que llevaban nuestros padres cuando eran novios y que nos va pequeña. Tanto hemos crecido.

lunes, 6 de julio de 2009

besar la lona

Casualidad, cambio
gracias, de nada
sé fuerte: le grita desde la esquina al púgil su entrenador
y el otro que le hace caso aunque sabe con seguridad
que esta noche besará la lona,
y ya no estará ella para hacer magia con las letras
besar la luna, una escalera...

martes, 23 de junio de 2009

cuaderno browning

Apaga el televisor y enciende la vela,
Duerme conmigo esta noche,
Susúrrame qué va a pasar mañana,
Dime que todo va a ir bien.

La casa parece acogedora
pero hay monstruos debajo de las camas.


La única razón por la que te quiero
es
ese defecto congénito
ese milímetro irresistible
ese gesto que apetece como un cigarro tras otro
esa capacidad de telequinesis con la que desordenas mi habitación

Las sábanas están dobladas en el cajón,
pero hay fantasmas llenos de rencor.


por tus pantalones cortos y tus uñas mordidas
porque me ruborizas y me quedo mirando al suelo
y le doy la mano a alguien que no es papá
y oigo mi nombre por los altavoces,
y no es tu voz,

Entra un Sol magnífico por las ventanas,
pero hay suicidas de puntillas en los alféizares.


porque te he dejado marchar lejos de mi.

Los grifos están cerrados
pero bucea el niño para encontrar el mando del televisor

Donde está mi amigo
El que solía cantar bajo el agua
Me dijeron que está en la luna
Con los bolsillos llenos de piedras.
Donde está mi amigo
traspasado por el arpón de Ahab
no, me dijeron que está en la luna,
la soga atada al cuello

los bolsillos vacíos.

La casa está deshabitada
pero yo aun sigo allí.

viernes, 20 de marzo de 2009

requiem a las azoteas


Brisa fresca que entra por la ventana y mueve la cortina como los gestos de las madres que regañan a sus hijos. Es época de nubes pasando desapercibidas, desviando la mirada para no ver a ese pariente molesto, confundiéndose las unas con las otras, o disimulando de pura vergüenza. Y es mentira que rasquen su barriga las antenas de televisión ya que las nubes viajan alto y aunque no fuera así las antenas no sirven para ir rascando barrigas cunilímbicas, que dirían ellas. Salvar a algún niño travieso de una caída desde la azotea, para eso sí. El niño candoroso que se asoma para ver los pechos incipientes de la vecinita de enfrente y se imagina que saben a flan, abre la boca grande y los aspira de una bocanada. Uno, dos. Dulce vecinita. Benditas antenas de televisión.
Álvaro mira por la ventana. Es raro que aún no haya empezado a llover. Una gaviota aventurera traza círculos en el cielo y se deja llevar por las corrientes de aire. Las otras chillan desde sus escondites como bebés hambrientos. Se fija en las antenas de televisión, y se imagina equilibristas andando por los finos hierros y gimnastas dando vueltas como si de una barra fija se tratasen. Con la televisión por cable y todos esos avances tecnológicos incomprensibles, pronto llamarán a nuestros timbres los chatarreros mintiendo y exclamando ¡correo comercial! para robarnos nuestro horizonte oxidado. O, en el mejor de los casos, en un futuro se consideren un objeto de coleccionista y le hagan uno de esos grupos de nombre absurdo en el facebook. Digámosle adiós, pues, a la fotogenia de las ciudades y sus miles de peinetas metálicas inservibles.
(fuckin TDT... donde esté el ruido de un viejo televisor)

jueves, 19 de marzo de 2009

George Best



"En 1969 dejé las mujeres y el alcohol, fueron los peores 20 minutos de mi vida"

"He gastado mucho dinero en mujeres, coches y alcohol. El resto lo he despilfarrado"

Estos goles y estas dos perlas sintetizan la esencia de Best. Héroe de la clase obrera, bebedor y mujeriego de encanto natural, futbolista excepcional, cuenta la leyenda que a alguna de sus innumerables amantes se les ha aparecido en sus camas después de muerto. The Belfast boy siguió bebiendo hasta su final, aun después de someterse a un transplante de hígado. Abajo Maradona!!! (es el único que no sabe que aun no ha dejado la coca)
Keep on running, George Best!!!

Una cuestión...¿porqué los jugadores de ahora cuando marcan lo celebran corriendo como si fueran vendedores del topmanta perseguidos por la pasma?

Como dijo el gran Rubianes, en la pelota está la droga. Que se entere Garzón.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Dalí et moi




Jules et Jim



Mejor la peli (aún sin subtitulos) que el libro

cotidiano particular I: calculadora solar

Ayer en el metro se sienta a mi lado un señor que hubiera parecido muy elegante en los 70, pero hoy solo es un señor con pinta de comprador compulsivo, (de gusto exquisito, eso sí)del Humana. Calvo y con gafas grandes. Digna su raya al lado que aunque sin pelo seguía surcando su cabeza, y su graduación desfasada(tal vez la que tenía en los 70) Pero lo más extraño es la calculadora solar que regularmente saca para hacer múltiples y complicadas operaciones para acabar siempre con el mismo resultado: 21345. Pienso en sueldo, en hipoteca, en cuponazo, en días de vida... pero la extraña y absurda forma en que llega a ese resultado me las hace descartar todas y dejarme con la duda...

viernes, 6 de marzo de 2009

Los reyes están muertos

Los reyes están muertos:
ya no les harán daño a nadie
(Sisa llovizna en mi habitación)
La monótona pianola
escala las paredes
sin llegar nunca a la cumbre.
Nenúfares en el sepulcro inundado de llanto.
Monárquicos de banderas cosidas a los párpados,
tramposos que se auto-coronan cada seis de Enero
y dejan que los niños lloren,
siguen apesadumbrados el cortejo.
Es ahora el turno de los apátridas:
escupen éstos con la cabeza bien alta.
El rey se enfada y la reina se sonroja,
príncipes y princesas naufragan
en sus barquitos de papel.
Hay quien tira monedas
y quien se ensaña con piedras.
Los reyes están muertos,
pero seguirán siendo felices
porque están hechos de oro
(la anciana sin sujetador los recuerda con nostalgia)

Hombres fuertes

Hombres fuertes,
con más pelo en el pecho que en la cabeza,
dan paladas a la noche.

Espantan a las abejas estos hombres de espalda ancha
pues florece el dorso de sus manos por el sudor
mientras empujan el horizonte de los viajes:
lo deslizan a través de las ventanillas
ante espectadores absortos y ojerosos.

Trabajan los hombres sudorosos,
el perfil del universo en la vena que recorre su sien,
enderezando todos los cuadros torcidos
de todas las paredes,
de todas las casas.

Clases magistrales de coraje,
de morir por el empate,
por un beso...
y agotados por la batalla,
aflojarán la luna del firmamento y volverán a casa a tientas.

Hombres fuertes,
con más pelo en el pecho que en la cabeza...

Atlas

El sueño llega: tarde de agosto.
Piquetes soñolientos reclaman sombra para todos.
Proclamas de ronquidos y nostalgia.
El joven estudiante de geografía se duerme:
la cabeza apoyada en el Atlas,
la mejilla pegada al papel por el sudor:
España se hunde en el mapa
en una frágil siesta colectiva,
himno nacional apesadumbrado
por el bostezo profundo
del más bello fin del mundo.
Buscará en vano debajo del pupitre
el pequeño y sobresaltado estudiante de geografía,
España, Portugal y un suspiro de África,
hasta que su mamá llegue,
y con el dedo mojado en saliva
borre las fronteras y los ríos de su mejilla.

lunes, 2 de marzo de 2009

te...nnesse williams

Te aparté el flequillo por si un sueño.
Solo escondías un peine y un amanecer.

jueves, 26 de febrero de 2009

Sam Chatmon - Who's Lovin ' You Tonight



Los bluesmen como el vino...
el lamento desdentado
de mi semana triste.
thanks sam

(no recordo qui va dir que els bluesmen envelleixen millor que les grans estrelles del rock, si més no amb més dignitat i acceptant cada arruga de la seva cara i cada dolor del seu cos. No tractant, a vegades amb resultats ridículs i espantosos, de aconseguir la juventud eterna. Matem Peter Pan! La cicatriu es memòria i és identitat)

miércoles, 25 de febrero de 2009

El señor Sequoia

El señor Sequoia agacha levemente la cabeza
para no golpearse con el quicio de la puerta.
Es barbilampiño, pero todo el mundo lo sabe reaccionario:
no es de los que tira la piedra y esconde la mano,
sino que lo hace a la inversa,
y nunca encuentra la mano con la que tirar la piedra....
a la fuerza ha aprendido a perdonar.
Hay quien dice lo viejo que es,
que ya ha vivido dos posguerras y que no sabe leer
porque nunca ha creído a los que dicen
que leer es como viajar sin necesidad de moverse.
Y es que el señor Sequoia enferma
si no va en tren un solo día.
Recordar es desatarse los cordones de los zapatos
para olvidar cómo atártelos de nuevo,
y mientras piensas en lo que ha dicho
te saca una Polaroid y la guarda en una pequeña carpeta
de la que sobresalen cientos de ellas.
Nunca mira al cruzar la calle y,
a veces, se aprieta los ojos con las yemas de los dedos
para luego ver borroso y no distinguir a la persona que no tiene ganas de saludar.
Y cuando alguien le dice que con el dictador se vivía mejor
El señor Sequoia esconde su mano y luego es incapaz de encontrarla.

martes, 10 de febrero de 2009

massa cafè

Massa cafè,
el nen estira la màniga del pare,
mira, un lemur!... pel pas de vianants.
Va tan ràpid que tot està a punt de esdevenir,
però mai a temps:
mòn aturat en llums estátiques
i alers que s´enlairen com globus d´heli.
A la meta d´arribada el públic es mostra impassible,
no trenca el corredor la cinta amb el pit
perquè a algú se li ha oblidat posar-la-hi,
i l´àrbitre que havia donat el tret de sortida
s´apreta el canò contra la templa,
una llàgrima aturada al bell mig de la seva galta.
Continua amb embranzida etíop
i segueix arribant massa aviat a tot:
gestos, pensaments, paraules
(encara que ell sempre hagi cregut
que les paraules estiguin sobreestimades)
Tracta d´aturar-se per que el temps,
com si l´haguès estat empenyent com a un cotxe espallat
que de sobte fa petar el motor,
hi pugi per la porta oberta del darrera.
Res a fer,
massa cafè,
el nen torna a estirar la màniga del pare.

domingo, 8 de febrero de 2009

clases magistrales

Deberías haber visto su cara
al ver los copos de nieve caer.
Su boca entreabierta
sala de espera de un paraíso,
aquel verano
que fue la rendija de una puerta,
el horizonte vertical
donde dos niños, primos lejanos seguramente,
jugaban a mamás y a papás.
Descubren la perfección de unos hombros quemados,
el sabor de unos labios candorosos,
la cama de matrimonio de la que arrancan las raíces,
y siembran árboles frutales
y una casa blanca que no se derrite en agosto,
del cielo y todo lo demás
que se encarguen las ventanas.
Llega a casa el papá cansado,
la mamá corrige los ejercicios de sus alumnos...
no, mejor un desconocido que llama a la puerta,
echan a suertes quien da el primer beso,
otra vez vuelve a perder él.
Entonces el desconocido (o el papá, que más da)
acerca sus labios temblorosos a los de ella,
y a veces abre los ojos
para ver los suyos cerrados y desenfocados,
pero los cierra rápidamente
porque todo el mundo sabe
que hay que desconfiar
de los que besan con los ojos abiertos.
No saben soñar.

sábado, 7 de febrero de 2009

diáspora

Diáspora en el cielo
y un Dios exiliado en mi bolsillo.
La cara del rey marcada en su mejilla,
restos de kleenex tras su oreja,
entradas de cine rasgadas sobre sus párpados.
Sus manos aferrándose a las costuras
para no caer por el agujero.
Y mi padre que cada día
al llegar a casa me registra.
Y yo que ya entro con los bolsillos del revés
como el adolescente que prueba ante el policía
que no lleva nada encima.
Muere el borbón en su perfil,
sopla el viento las migajas de su barba de comunista
(muchos dioses se parecen a Marx)
mientras se frota la cabeza por el golpe
y se pregunta cómo puede doler más caer de un bolsillo que del cielo.
Observa desde el portal como se enciende la luz de mi ventana,
el rostro taciturno de papá,
su mirada desconfiada peinando la calle,
y lanzando fugaces al agujero de mi bolsillo.
Se esconde el Dios diminuto
detrás de un folleto arrugado de ofertas de supermercado,
y murmura mientras se santigua:
Me cago en su padre